domingo, 28 de enero de 2018

Arrow Sport

El Arrow Sport, un biplano americano biplaza de los años 20 tiene algunas características muy curiosas. El diseño es de un Sr. llamado Sven Swanson (tan sueco como suena el nombre) y a diferencia de prácticamente toda la competencia, piloto y pasajero van sentados uno al lado del otro. Esto lo hizo relativamente popular como entrenador.

Fíjense en las alas características de muy grueso perfil. Museo del Aire y del Espacio, Washington, USA, 2015.

Las alas son de lo más original. Aparte de tener un perfil Eiffel (sí, el de la torre) y tener una forma característica, resulta que son cantilever. Es decir, no necesitan ni montantes ni cables de conexión para mantener la integridad estructural. Esto era rarísimo en la época, y necesitaban lógicamente una construcción muy sólida. Pero los pilotos no se fiaban, con lo que decidieron poner los típicos montantes en "N" uniendo ambos planos. Que no servían para nada, pero así todo el mundo contento.


Este Arrow Sport de 1929 tenía originalmente un radial Le Blond de 5 cilindros y 60 HP con el que debía ir justito de potencia. En Inglaterra, donde estuvo un tiempo y  de ahí la matrícula G, se lo cambiaron por otro Le Blond de 90 HP. Ambos arcaicos y enormes: el primero 3,8 litros y el segundo 4,4. 

El avión voló por primera vez en 1926. Se hicieron unos 100, de los que quedan sólo unos poquitos en vuelo. Y sí, Vds. lo han adivinado: no me importaría nada darme una vuelta en una máquina de estas.

viernes, 26 de enero de 2018

Adventurer

Uno de los aviones más raros que he visto, tanto en sentido de poco frecuente como de extraño es este Adventure Air Adventurer (aventurero) que les muestro. Lo poco que sé es que en 2002 estaba en el Aeródromo de Son Bonet (Mallorca), y que el Sr. X, constructor y dueño, tuvo la amabilidad de enseñármelo. Lo había hecho a partir de un kit de construcción amateur comprado en USA, y llevaba un motor de coche americano.


A día de hoy se puede encontrar en el registro español de aeronaves el EC-ZHJ, un Adventure que imagino es el mismo. Pero no he sido capaz de encontrar información alguna. El avión original es un hidrocanoa anfibio del que también hay muy poca información. La compañía original no existe, alguno hay por el mundo, y poco más.

Así que vamos a darle a la imaginación. X tuvo el sueño de tener su propio anfibio con el que poder ir a esos sitios preciosos de la costa de las Baleares: sales de Son Bonet y te vas a Es Trenc. O Algairens. O S'Espalmador. Amerizas, te acercas a la playa, tiras el ancla, te das un baño, lees un libro, miras el agua. Por la tarde, un bonito vuelo de vuelta.


Lástima que en este país no te dejen hacerlo. Si finalmente X completó su avión y lo pudo volar, me temo que se tuvo que conformar con operar desde los aeródromos autorizados. O arriesgarse, claro.

jueves, 25 de enero de 2018

Twin Astir III

Grob decidió a finales de los 80 mejorar su probado velero biplaza de escuela Twin Astir II, que había tenido muchísimo éxito (549 construidos). Para ello, conservaron el fuselaje y la cola prácticamente sin cambios. El siguiente modelo  Twin Astir III, que voló en por primera vez en 1989, lleva un ala completamente nueva, de más envergadura (18 m), acodada en 3 secciones como la de un Discus, y con un perfil Horstmann & Quast más delgado y moderno.

Un Twin III Acro en aquel entonces completamente nuevo en Zeeland, Holanda, 1992. El ala acodada le da un aspecto más elegante que el anterior Twin II.

Además de la versión normal Acro (-bática) de 18 metros, se hicieron unos pocos con alas de 20 metros y también una versión auto-lanzable, con motor retráctil Rotax 505A de 43 CV. La fábrica le daba un planeo de 38, aunque en pruebas independientes salía algo menos. En total se hicieron 115. De vez en cuando sale alguno a la venta.

Un día perfecto en el Pirineo. Techos altos, maravillosas vistas, altura de sobra, la vida es bella. Santa Cilia de Jaca, 2003.

He volado unas poquitas veces en un Twin III por el Pirineo y me pareció un avión estupendo. Sin perder maniobrabilidad, los mandos daban la sensación de ser más ligeros y suaves, y el avión parecía volar claramente más que el Twin II del Club. Pero también es verdad que el avión era más nuevecito y que eso siempre infunde optimismo.

Intentando salir del agujero. Canal de Berdún, Huesca, 2004.

miércoles, 24 de enero de 2018

Inicios del vuelo en USA (por segunda vez)

Aunque los hermanos Wright habían volado por primera vez en 1903, y siguieron desarrollando sus aviones, en la práctica no los enseñaron en público hasta 1908, por una mezcla de desconfianza y obsesión por obtener un contrato. Mientras tanto otra gente hacía progresos y construyeron aviones que volaban, tanto en Europa como en América. En 1907, el inventor del teléfono - pero también interesado en la aviación - Alexander Graham Bell fundó un grupo llamado Aerial Experiment Association (AEA), y reclutó entre sus miembros a Glenn Curtiss, como experto en motores de gasolina.

El Golden Flyer era un biplano que incorporaba y mejoraba varios elementos clave del June Bug. Con su motor de 4 cilindros y 25 HP Curtiss consiguió en 1909 un vuelo récord de 52 minutos y 29 millas. Cradle of Aviation Museum, Nueva York, 2015.

Creo que Mabel Gardiner Hubbard, la mujer de Bell, debería tener más reconocimiento. No sólo estuvo detrás del invento de la telefonía, fue ella la que animó a constituir el grupo en 1907 y pagó de su bolsillo el equivalente actual a un millón de dolores para financiar sus actividades. El grupo fue diseñando y probando una sucesión de aviones que consiguieron volar entre 1908 y 1909. Y a diferencia de los Wright, mostraron públicamente sus éxitos y tuvieron un espíritu cooperativo y comercialmente desinteresado.

Curtiss no sólo ganó el trofeo Scientific American por segunda vez con ese vuelo. La Sociedad Aeronáutica de Nueva York le pagó 5.000 pavos por el avión, y encima recibió la licencia de piloto nº1 de USA (¡por delante de los Wright!, ya que las primeras 5 se dieron por orden alfabético). Manda huevos. 

Todos ellos tenían motor Curtiss. El Red Wing y el White Wing consiguieron saltos cortos. Pero el muy mejorado June Bug, el primer diseño de Curtiss, tenía alerones, tren triciclo, y consiguió el trofeo Scientific American por ser el primero en volar en América más de un kilómetro, el 4 de julio de 1908.  Esto ya lo habían conseguido los Wright ¡en 1904!, pero había pasado desapercibido. Inmediatamente el grupo recibió una denuncia de los Wright por infringir su patente de control de vuelo, que a la larga se convertiría en una larga y costosa guerra comercial entre los Wright y Curtiss.

La réplica tiene una pinta deliciosamente arcaica. Fíjense que los alerones, un invento clave, estaban puestos entre los planos y por delante (¡!). A partir del Golden Flyer, Curtiss construyó el Reims Racer y su primer modelo comercial de éxito, el Pusher.

Aunque hicieron otros dos aviones, la AEA ya estaba tocada y desapareció en 1909. De hecho, Curtiss ya veía muy claramente por donde seguir y fundó la empresa Herring-Curtiss con otro pionero de la aviación, Augustus Moore Herring. El primer modelo de la compañía, el Golden Flyer de Curtiss, incorporaba y mejoraba lo aprendido en la AEA y sentó las bases de su éxito. Para el año siguiente ya era sólo la Curtiss Aeroplane Company. Ironías del destino, en 1929 se convertiría en la Curtiss-Wright Corporation, incorporando a la Wright-Martin que tenía parte de su origen en los Wright... y que sigue existiendo hoy en día.

lunes, 22 de enero de 2018

Dornier Do X

Claude Dornier construyó en los felices años 20 un gigantesco avión de transporte de pasajeros llamado Dornier Do-X. Costó una fortuna y unas 240.000 horas de trabajo. Consiguió un barco con alas que volaba principalmente a ras del agua y poco más: la cosa terminó en un descomunal fracaso.

Un cartel publicitario de la época preveía vuelos desde el sur de Alemania hasta Egipto. Deliciosamente evocador, aterrizar en el Nilo rodeado de palmeras y pirámides. Nunca se hizo.

Básicamente era un Dornier Wal agrandado. Voló por primera vez en 1929 (con matrícula D-1929), y sigue siendo el único avión construido con una docena de motores. Inicialmente eran radiales de 9 cilindros construidos con licencia inglesa Bristol Jupiter de 525 HP (X 12 = 6.300 HP). Aparte de calentarse, especialmente los 6 de atrás, la altura máxima de vuelo eran unos poco impresionantes 425 m (¡!). Incluso tras cambiar a los motores americanos V12 Curtiss Conqueror de 610 HP (X 12 = 7.320 HP), el monstruo seguía estando muy falto de potencia.

En el Museo Dornier de Friedrichshafen tienen una gran maqueta del primer Dornier Do X con motores yanquis Curtiss. Entre que estaban al aire en barquillas y los radiadores planos resultaban muy poco aerodinámicos. Fíjense en el tremendo espesor de las alas y en las aletas por encima de los alerones y elevadores: los mandos eran manuales (¡!) pero no accionaban directamente las superficies de mando (que eran grandísimas), sino las aletas. Estas forzaban a su vez la deflexión en sentido contrario del mando. Ingenioso. Alemania, 2016.

Y es que el avión era masivo: 56 toneladas de peso máximo, casi 50 metros de envergadura y 3 cubiertas pensadas para llevar 66 pasajeros (y 10 ó 14 más de tripulación, incluidos pilotos, ingeniero de vuelo, varios mecánicos, camareros y cocinero...) con el máximo lujo. Hubo que esperar casi 15 años para que volaran los primeros aviones de pasajeros con una capacidad similar, como el Lockheed Constellation. Que además de mucho más moderno y aerodinámico llevaba sólo 4 radiales Wright R-3350 Duplex-Cyclone de 2.200 HP (X 4 = 8.800 HP).

Esta otra maqueta corresponde al Dornier Do X2, el primero de los italianos. Los motores FIAT estaban mucho mejor carenados. Fíjense en el aspecto de barco, incluida la proa de destructor y el puente de mando. Casi esperas ver las chimeneas.

Con enormes dificultades, el "X" consiguió hacer un viaje a USA en 1930 con problemas sin fin, tardando casi 9 meses en volver a Alemania (¡!). Nadie quería el avión y Dornier estaba semiarruinada entre la depresión, construirlo y pagar las facturas de los motores y la gasolina. El avión pasó a un museo donde finalmente fue destruido en un bombardeo aliado en 1943. Increíblemente los italianos encargaron dos más (X2 y X3, con motores italianos V12 FIAT A.22 de 570 HP (X 12 = 6.840 HP). Tras descubrir que no tenían utilidad práctica fueron desconsideradamente desguazados en 1937.

Ahora, hay que reconocer que verlo despegar del agua era todo un espectáculo.

domingo, 21 de enero de 2018

Staudacher

Jon Staudacher es un yanqui que se dedicó inicialmente a las lanchas de competición, adquiriendo mucha experiencia con los materiales y los motores. Luego cambió el agua por el aire: aprendió a volar en una Cessna 140. Cada vez más metido en el mundillo de la acrobacia, construyó una Pitts S-1 y pronto se metió en diseños propios.

Jorge Macías llega a la plataforma del aeropuerto de Lérida en su Staudacher de matrícula americana. Carreras F1, 2014.

El Staudacher S300 es un avión acrobático que voló por primera vez en 1993. Con un motoraco Lycoming 540 de 6 cilindros y más de 300 HP, unido a una estructura muy ligera que combina madera, fibra, tubo de acero y tela, el avión es rápido y muy maniobrable.

Supongo que para ganar ligereza, la cola tiene perfil plano y está arriostrada por cables. Fíjense en que el triángulo para comprobar la vertical está sólo en el plano izquierdo (foto anterior), y no en el derecho.

Parece que sólo se han hecho nueve de ellos, todos diferentes según los gustos de cada cliente en particular. Hay hasta uno con tren retráctil (¡!). Y aunque tengan sus virtudes, creo que los de Extra Aircraft no están especialmente preocupados.

El Staudacher S300 está pensado para +/- 10 G y pesa menos de 600 kg. 

viernes, 19 de enero de 2018

Victor

En 1947 los británicos, aunque teóricos "vencedores" en la Segunda Guerra Mundial, estaban lejos la tranquilidad. Su antaño privilegiada relación con los yanquis se había deteriorado, y el oso soviético se estaba convirtiendo rápidamente en el próximo enemigo de la guerra fría. Los bombarderos de hélice de la guerra ya no eran opción. Como los yanquis se habían negado a darles sus secretos atómicos (y eso que los británicos habían colaborado decisivamente en el Proyecto Manhattan) se pusieron a desarrollar su propio programa y los bombarderos que debían llevar los pepinos atómicos.

Un Victor cisterna K2 reconvertido a partir de un B2. Fíjense en el considerable tamaño y la "pinta de ciencia ficción". Base Aérea de la Royal Air Force St Mawgan en Cornualles, Inglaterra, 1979.

El Ministerio del Aire lanzó ese año una especificación para un bombardero de alcance medio (unos 3.000 km) que pudiera llevar una bomba de 4.500 kg a más de 900 km/h y 15.000 metros de altura. Eso los hacía invulnerables a los cazas por entonces en servicio, y una presa muy difícil para los que iban a entrar en breve.

A diferencia de los aviones yanquis que tenían los motores en pilones colgando de las alas, todos los bombarderos "V" tenían los motores en los encastres, dentro de las alas. Esto era mucho más complicado de fabricar y de mantener, y además no ofrecía ventajas aerodinámicas. Pero les dan un aspecto característico.

El resultado fue la fuerza de bombarderos "V": la Royal Air Force fue incapaz de decidirse por uno de los 3 aviones que se desarrollaron (Valiant, Vulcan y Victor), por lo que todos entraron en servicio. Esto fue seguramente una pérdida de tiempo y recursos enorme, en lugar de centrarse en un sólo diseño, como hicieron los yanquis (el Boeing B-47).


Este Victor B(K)1 XH648 es una conversión de la primera serie de bombarderos B1. Sólo tenían dos contenedores de reabastecimiento bajo las alas, mientras que los K2 llevaban además uno central. Duxford, Inglaterra, 1993.

El Handley - Page HP.80 Victor (como en latín, vencedor), fue el último de estos bombarderos en volar (1952) y entrar en servicio (1958). Era en muchos aspectos el más original y avanzado. Tenía un ala "creciente" (las alas con varios tramos en distinta flecha) y un aspecto de lo más futurista. Un avión tremendo con cuatro turboreactores, 36 metros de envergadura, casi 100 toneladas de peso máximo al despegue, y que sin embargo era al parecer de lo más maniobrable y capaz de superar la velocidad del sonido en ligero picado.

En el Museo de la Royal Air Force se conserva el morro de "Lucky Lou", un Victor K2 que se fabricó como bombardero B2 en 1963, fue convertido a cisterna K2 en 1974, participó en la guerra de las Malvinas en 1982 y en la del golfo de 1991, y finalmente fue dado de baja en 1993. Londres, 2016.

Los Victor tuvieron una primera vida como bombarderos atómicos llevando entre otras armas misiles Blue Steel, inicialmente en altura y luego a baja cota. También hubo conversiones para hacer reconocimiento con cámaras y radar. Pero a partir de 1965 se empezaron a convertir para reabastecimiento en vuelo. En este papel estuvieron en servicio hasta 1993, participando en las guerras de las Malvinas, del Golfo y de Iraq.


Muchos años despues volví a ver el Victor XH648 mientras estaba en restauración. Se construyó como B1 y voló en 1959. Su carrera como bombardero duró poco, convirtiéndose a cisterna en 1965. Se retiró en 1976. Actualmente está ya completamente restaurado. Imperial War Museum, Duxford, 2018.

No queda ninguno en vuelo, pero hay dos que "casi" lo están, Lusty Lindy y Teasin' Tina, que de vez en cuando hacen carreras de despegue sin llegar a volar.

XH672 "Maid Marian" es un Victor que se construyó como bombardero y entró en servicio en 1960. Fue el último en convertirse a cisterna en 1978. Participó en la absurda guerra de las Malvinas y del Golfo. Fue el último Victor en volar en 1993 antes de llevarlo al Museo de la RAF en Cosford. Inglaterra, 2018.

En el Midland Air Museum de Coventry conservan el morro del Victor XH592. Inglaterra, 2018.


lunes, 15 de enero de 2018

Thunderbolt

El más grande, el más pesado, el más fabricado, el mejor armado, el más rápido, y el más caro. El Republic P-47 Thunderbolt reune muchos superlativos entre los cazas monomotores yanquis de la Segunda Guerra Mundial. Cuando apareció en 1941 era un avión masivo: una enormidad con un gigantesco motor radial que llegó hasta los 2.800 HP y que en sus últimas versiones podía pesar más de 8 toneladas al despegue. Para un caza monomotor esto era mucho: su enemigo típico, un Messerschmitt 109 nazi era mucho más pequeño y pesaba bastante menos de la mitad.

Un Republic P-47D en acabado de metal natural, muy frecuente en su época. National Air and Space Museum - Centro Udvar Hazy, Washington, USA, 2015.

El Thunderbolt (rayo), o "Thud", o "Juggernaut" (gigante), o "Jug", era además de grande muy resistente y con una enorme capacidad de absorber daño. En una famosa ocasión, Robert Johnson estaba el 26 de junio de 1943 en una formación de P-47 sobre Francia cuando les atacaron unos cazas Focke-Wulf 190. Recibió fuego de cañón de 20 mm que dañó el motor e inutilizó el sistema hidráulico, la cabina y el sistema de oxígeno. Con lo que no podía respirar. Y el líquido en contacto con el oxígeno prendió fuego al avión. Y por si tenía pocos problemas, entró en barrena.

El fuselaje grande y profundo era necesario para el sistema turbo, lo que obligaba a poner el ala en posicion media. Como la hélice es enorme (4 metros de diámetro), las patas del tren eran extensibles. Vean los 8 cañones de las ametralladoras.

Johnson intentó saltar pero no pudo abrir lo suficiente la cabina. Mientras tanto había perdido altura y descubrió que el caza respondía a los mandos. Salió de la barrena. El fuego se apagó. Puso rumbo al Canal de la Mancha a poca potencia. Peeeero otro FW-190 lo vio, se le puso detrás y comenzó a disparar. Johnson solo pudo bajar el asiento y protegerse detrás de su blindaje. Una furiosa granizada de balas se abatió sobre el maltrecho avión.

La masiva entrada de aire refrigeraba el motor de 18 cilindros en doble estrella y proporcionaba aire al turbocompresor. La hélice de palas anchas mejoró la trepada.

Johnson intentó zafarse resbalando, el caza alemán le pasó y él a su vez le disparó sin éxito. El alemán giró para ponerse a su cola y de nuevo le disparó. Johnson intentó evadirse y vio como el otro le miraba incrédulo (¿cómo es posible que no haya derribado a este tipo?). Saludó y por tercera vez se puso a su cola para dispararle, hasta agotar su munición. Se puso de nuevo a su lado, supongo que con una inmensa frustración, saludó, y se fue. "Lo he intentado, tío, pero no ha habido manera de matarte". El alemán era el as Egon Meyer, que no sobrevivió a la guerra.

Este P-47 es de 1944 y se quedó en USA. Está ahora al lado del Boeing B-29 Enola Gay que tiró la primera bomba atómica sobre Japón.

Johnson consiguió volver a su base en Inglaterra. Y aterrizar: el tren bajó y las ruedas estaban intactas (¡!). El avión tenía 21 impactos de bala de cañón de 20 mm y literalmente cientos de ametralladora de 7,92 mm. Él tenía un tiro en la nariz, metralla en las manos, y dos tiros en la pierna. Se recuperó, llegó a ser un as (27 victorias, todas en P-47), jefe de pilotos de pruebas para Republic y alcanzar los 78 años (¡!). Esto es excepcional, claro, y puro azar. Pero refleja algo real: el avión era muy muy resistente.

Los británicos recibieron de los yanquis P-47D que utilizaron sobre todo al final de la guerra en el sudeste asiático contra los japoneses. Pero este en concreto se quedó en USA hasta que en 1951 se mandó a la Yugoslavia de Tito con otros 149 en concepto de ayuda militar (sí, Tito miraba a ambos bloques según le convenía). Se usó hasta más o menos 1960 y en los 80 lo recupero un coleccionista inglés que lo intercambió por un Spitfire con el Royal Air Force Museum. En la restauración se pintó como los aviones británicos del final de la guerra. Londres, 2016.

Conseguir un avión así no fue un golpe de genio. Se debe a una larga evolución en el diseño aeronáutico con dos protagonistas, ninguno de ellos yanqui: Uno era ruso y el otro georgiano.  El ruso era Alexander P. de Seversky, un fenómeno de tipo que luchó en la primera guerra mundial, perdió una pierna y siguió pilotando para el zar de todas las Rusias. Le enviaron a USA en 1918, donde eligió prudentemente quedarse tras la revolución. Seversky fundó la Seversky Aircraft Corporation, que se convertiría en la Republic.

Fíjense en el tamaño del fuselaje. Las "branquias" son la salida de los gases de la turbina.

Y el georgiano era Alexander Kartveli, un ingeniero importantísimo en el desarrollo de la aviación, pero menos famoso que otros yanquis, me temo que en parte por su origen. Kartveli se convirtió en el ingeniero jefe de Republic y fue el que diseñó el P-47 (y otros muchos aviones). Aunque a Seversky lo habían echado de Republic, sus ideas fueron decisivas para crear el enorme caza de Kartveli, en una sucesión de aviones que se fueron construyendo desde principios de los años 30.

"Cheek Baby" es un P-47N de la última serie. Tenía alas "húmedas" con más combustible, y se pensó como escolta de las arrasadoras misiones de bombardeo de los B-29 contra Japón al final de la Guerra. Cradle of Aviation Museum, Nueva York, 2015.

El Thunderbolt se diseñó inicialmente como un caza de gran altura. Para ello, se utilizó el nuevo radial Pratt Whitney R-2800 (que se utilizaría en otros muchos aviones, como en los cazas de la marina Grumman Hellcat y Bearcat), pero con una diferencia muy importante: un complicado sistema con un turbocompresor, pensado para no perder potencia en altura. Kartveli diseñó primero ese sistema y luego construyó a su alrededor el fuselaje grande y profundo necesario para contener la turbina, los conductos y los sistemas necesarios.

La serie N tenía una extension de la deriva para aumentar la estabilidad longitudinal y ayudar a salir de las barrenas. Fíjense en la visibilidad de la cabina de burbuja y lo pequeño que resulta el maniquí con respecto al avión.

Resulta curioso que finalmente el P-47 se utilizara masivamente a baja altura para ataque al suelo. Según los americanos, estos rechonchos cazas destruyeron 86.000 vagones de tren, 9.000 locomotoras, 6.000 vehículos blindados y 68.000 camiones, lo que te deja frío. Y explica una parte importante de por qué hacia 1944 a los alemanes les resultaba muy difícil moverse.

Quedan un puñao de P-47 en vuelo, todos en USA. No es de los aviones más bonitos, pero impresiona. Hasta pueden comprar uno.