sábado, 27 de agosto de 2016

Attacker

Muchos de los primeros intentos de avión a reacción son feotes porque combinan lo conocido con lo nuevo. El Supermarine Attacker mezcló un caza Supermarine Spiteful con el nuevo reactor Nene. Y salió lo que ven: alas rectas, tren con rueda de cola y poco aspecto de reactor. Voló en 1946 y tuvo una breve carrera en la Armada de Su Majestad, siendo el primer reactor que operaron. En la Fuerza Aérea de Su Majestad no lo quisieron: no ofrecía ninguna ventaja sobre los Meteor y Vampire que ya tenían.

Un Supermarine Attacker F1 en el Fleet Air Arm Museum. Yeovilton (Inglaterra), 2010.

El tren de rueda de cola tenía sus propias peculiaridades. No sólo hacía el aterrizaje en un portaviones más complicado, cuando despegaba de una pista sin pavimento el chorro dejaba un surco "donde se podían tumbar tres hombres". Para 1951, cuando entró en servicio, los mucho más elegantes y claramente superiores Sabre ya se estaban pegando con los MiG 15 en Corea.

viernes, 26 de agosto de 2016

Extra 300

Vean al maestro. Admiren lo que puede hacer un piloto excepcional como el húngaro Péter Besenyei a los mandos de un Extra 300. No es sólo la aparente facilidad para hacer figuras tradicionales amplias, sin esfuerzo, como si subir o bajar fuera lo mismo y girar en cualquier dirección cosa de nada. Es que en las manos de pilotos como éste, los aviones parecen transgredir su propia condición de avión y hacer cosas en el aire que parece que no les corresponden.


El Extra 300 original. Biplaza, con el ala en posición media, y 300 caballos. Aero - Friedrichshafen, Alemania, 2016. Fíjense en las ventanas de la parte baja del fuselaje, para tener mas referencias.

En la actualidad la superioridad en la acrobacia de alto nivel de los Extra 300 es avasalladora. Miren los resultados de las competiciones de los últimos años y comprueben la cantidad de Extras 300/330. Joer, si hasta en los campeonatos rusos dominan los Extra 300, sobre los antaño todopoderosos Sukhoi.


El Extra 300 S es una variante monoplaza con el ala más corta y los alerones más grandes. El piloto tiene bien visible la tabla de acrobacia que va a volar en notación Aresti. Se puede ver también la estructura de tubos de acero del fuselaje. Aeropuerto de Lérida, 2014.

Walter Extra desarrolló el Extra 300 del anterior Extra 230. Voló por primera vez en 1988 y está pensado para hacer acrobacia: tiene una maniobrabilidad extrema, un peazo de motor de 300 ó 330 caballos (lo que le da la denominación), muy poco peso (menos de 1000 kilos completo), muy poco tamaño (8 metros o menos) y unos mandos enormes.

De los más de 400 Extras 300/330 construidos, la versión más común es la 300 L. Es biplaza y con el ala baja reducida a sólo 7,3 metros. Los alerones mejorados permiten toneles a 400º de rotación por segundo (!). Santa Cilia de Jaca (Huesca), 2007.

El avión está pensado para aguantar 10G positivas o negativas. Para eso tiene un fuselaje de tubo de acero y un ala con largueros y recubrimiento de fibra de carbono. Tiene perfil simétrico, no tiene incidencia y no tiene diedro. Luego le da igual estar en vuelo normal o invertido.

Un Extra 330 SC, el monoplaza más moderno de Extra, pensado para la categoría ilimitada. Aero - Friedrichshafen, Alemania, 2016.

Todas estas monadas hacen que un chisme de estos cueste del orden de 350.000 boniatos. O menos de segunda mano, pero en todo caso un congo. Me parecen unas máquinas impresionantes, desde luego. Pero creo que me gusta más el hermano pequeño.

El 330 LX es el biplaza acrobático potente, casi como el anterior cuando vuela solo, pero que permite volar con dos personas sin perder prácticamente capacidad acrobática. Aero - Friedrichshafen, Alemania, 2016.

Hace poco ha volado una versión eléctrica de la que ya les había hablado. Los responsables del proyecto especulan con aviones eléctricos de 100 pasajeros en 2030... ya se verá.

Para gente con mucha pasta que quiere un avión acrobático y a la vez de turismo rápido han pensado el 330 LT: el ala no es simétrica, la cabina es más mona (incluyendo si quieres pantallas modernas, piloto automático y tal) y puedes viajar a casi 400 km/h. Y cuando llegas, hacer un ocho cubano para iniciar el viento en cola. Aero - Friedrichshafen, Alemania, 2016.


jueves, 25 de agosto de 2016

Eurocopter EC 130

Este helicóptero es un derivado moderno del Aerospatiale AS350 Écureuil, con un rotor de cola intubado (llamado fenestron) y una cabina más grande en la que caben hasta 8 personas.  El fabricante es ahora Airbus Helicopters y ha cambiado la denominación a H130.

Un Eurocopter EC 130 alquilado por la Generalitat para el servicio contraincendios con su Bambi Bucket . Aeropuerto de la Seo de Urgel, 2012.

Aunque en la categoría ligero y monomotor, es un peazo de máquina con una turbina de casi 850 caballos y hasta 2,5 toneladas de peso máximo al despegue. Sólo te piden unos 2,7 millones de euros por uno nuevo o a partir de 1,2 por uno usado. Desde su primer vuelo en 1999 se han hecho más de 400.

miércoles, 24 de agosto de 2016

Instructor

La empresa Fokker se encontró tras la II Guerra Mundial buscándose la vida, construyendo veleros y autobuses. Uno de sus primeros proyectos nuevos fue el Fokker S-11 Instructor, un entrenador sencillo biplaza lado a lado, que fue pedido inicialmente por la Fuerza Aérea Holandesa.

Un impecable Instructor ex-militar con matrícula civil. Holanda, 1984. La Fuerza Aérea dejó de volarlos en 1973.

El avión voló por primera vez en 1947 y tuvo bastante éxito. Además de los construidos para Holanda (unos 100), Israel (41) y unos poquitos para Bolivia y Paraguay (8 + 8), se construyeron bajo licencia en Brasil (100 S-11 y 50 S-12 de tren triciclo) e Italia (178 como Macchi M.416).


Arriba. Un Macchi M416 construido con licencia que parece listo para volar, incluida la bandeja para recoger el aceite que cae del motor. En el impresionante Museo della Aeronautica Militare en Vigna del Valle. Italia, 2008.
Abajo. El panel de instrumentos del M416. Completamente funcional y militar. A la izquierda, instrumentos de vuelo. A la derecha, motor y comunicaciones. Museo Volandia, Italia, 2022.

Como otros muchos entrenadores militares, con el tiempo fueron declarados obsoletos y vendidos a operadores civiles. En Holanda, además de volar en la patrulla histórica del ejército del aire, hay una escuadrilla acrobática que vuela 4 de ellos en formación, además de varios en manos privadas.
Mal rollo. Un Macchi M.416 estrapallao en el aparcamiento del Parco Tematico dell'Aviazione. Italia, 2014.


martes, 23 de agosto de 2016

Bañera volante

Esta encantadora caricatura de avión, que parece del ratón Mickey, (es de esa época), es sin embargo importante en la historia de la aviación. Es un Aeronca C-3, un desarrollo biplaza del C-2, y probablemente la primera avioneta ligera de turismo que se fabricó en cantidad.

Una C-3 en el hangar de la Classic air Force, Newquay, 2014. Se fabricó en USA pero lleva en Inglaterra desde 1936. Reconstruida 3 veces, en una ocasión con partes de otra construida en el Reino Unido. En 2015 se le soltó la hélice en vuelo (!) y el piloto aterrizó sin daños en un Club de golf.

El origen de este avión característico, simpático y chato, es el Aeronca C-2 (el C-1 es en realidad un C-2 con motor de C-3, no es anterior). Jean Roche, un ingeniero del ejército diseñó el Roche Original en 1923, partiendo de las alas de un curioso planeador - blanco anterior. Al no encontrar un motor adecuado, finalmente se dirigió a la Aeronautical Corporation of America (después Aeronca) para utilizar su motor de dos cilindros horizontales opuestos. Tras llegar a un acuerdo, se fabricaron 164 Aeronca C-2, básicamente iguales a su prototipo, de 1929 en adelante.

El fuselaje es de tubo de acero soldado y tiene en realidad sólo 3 largueros principales (la sección es un triángulo con el vértice hacia arriba). La forma se consigue con costillas de madera y larguerillos de relleno en madera. Esto le da ligereza y resistencia, y se ha venido usando en todas las Aeronca y derivadas desde entonces.

El Aeronca C-3 es un desarrollo biplaza con un motor más potente (pero poco, sólo 36 HP) que voló por primera vez en 1931. Ambos son muy parecidos y se les conoce como Bathtubs (bañeras). Al parecer, no porque parecen una bañera con alas (que también), sino porque vas sentado prácticamente en el suelo, como si te estuvieras dando un baño (!).

El fabuloso aeródromo de Old Rhinebeck tiene una C-3 original de 1931. Ahora no está en vuelo, pero lo ha estado durante muchos años. Estados Unidos, 2015.

En su momento tuvo mucho éxito: se hicieron más de 400. No había otro biplaza más barato. En 1935 se vendía por 1.895 dólares. Esto era una fortuna: en aquel entonces el salario medio de 2 años, equivalentes a unos 33.500 dólares actuales. Recuerden que estamos en medio de la Gran Depresión.

Es la misma que la anterior: despista un poco porque está pintada de amarillo por un lado y de negro y rojo por otro. No me extrañaría que tuviera un plano de otra C-3.

Me encantaría darme una vuelta en esta máquina "ligeramente" más pesada que el aire. Tiene características de motovelero y probablemente no lo encontraría especialmente difícil. Al parecer era relativamente normal mandar a la gente a volar sola tras unas escasas 5 horas de doble mando, por su vuelo dócil y predecible.

El avión dejó de fabricarse en 1937, pero no porque faltara demanda. Las nuevas normas de aeronavegabilidad no permitían una serie de características, como el ala arriostrada con cables, el entelado casi completo, el encendido único o el no tener anemómetro. Cosas que le dan un indudable atractivo.

domingo, 21 de agosto de 2016

Airacomet

El Bell P-59 Airacomet es más bien una castaña de avión. Pero como es el primer avión a reacción yanqui, ocupa lugar de honor en el Museo del Aire y del Espacio de Washington.

El prototipo XP-59 colgado del techo. Estados Unidos, 2015.

Los ingleses enseñaron a los yanquis en 1941 su innovador avión a reacción Gloster E.28/39. Rápidamente éstos consiguieron los planos del turborreactor. Encargaron a la empresa Bell un avión de caza propulsado a reacción, que voló por primera vez en 1942 y llamaron Airacomet (por aquel entonces, todos los aviones Bell eran Aira-algo). Al igual que alemanes y británicos, tubieron que poner en el caza dos motores para conseguir las prestaciones requeridas.

Por primera vez se utilizaron barquillas conformadas al fuselaje para poner los motores.

El avión fue más bien decepcionante: sus 650 km/h de velocidad máxima era poca cosa. Un Mustang de hélice era claramente mejor. Y los primeros reactores operacionales, el Meteor británico y sobre todo el Messerschmitt 262 alemán eran mucho más rápidos.

Como era importante registrar datos de las pruebas en vuelo y el piloto estaba ocupado volando el avión, decidieron poner un observador en el morro. Para ello, cortaron un agujero en la parte de arriba, pusieron un parabrisas, un asiento y un panel de instrumentos... el observador iba literalmente al aire en lo que en aquel entonces era uno de los aviones más modernos del mundo (!). Al restaurar el avión lo devolvieron a la primera configuración. Una pena, sería mucho más original con la cabina abierta delante...

Sólo se hicieron unos pocos. Pero sí que sirvió para que los americanos empezaran a operar con reactores. En muy poco tiempo hicieron aviones mucho más impresionantes.


Arriba y abajo, bajo las toberas del impresionante North American XB-70 Valkyrie. Bell construyó tres prototipos XP-59A, 13 YP-59 de pruebas, 20 P-59A de la primera serie de producción y 30 P-59B de la segunda. Este P-59B llevaba motores americanos General Electric J-31 (basado en el motor inglés), armamento pesado y más bien poco que ofrecer. Pero era el comienzo de una nueva era. Museo de la Fuerza Aérea de Estados Unidos. Dayton, USA, 2019.


LS 3

Este avión es un "Persianas Schneider modelo LS 3" (Rolladen Schneider LS 3). Lo cual no tiene mucho glamour, pero es que el Sr. Schneider efectivamente fabricaba persianas. Lo que pasa es que también era piloto de vuelo a vela, y de los buenos.  Schneider era amiguete del grupo de estudiantes que diseñó y construyó el Darmstadt D-36 "Circe", un velero revolucionario. Uno de ellos era Wolf Lemke, con el que empezó a construir la saga de veleros LS (Lemke - Schneider).

Un LS 3 en la línea de salida del Campeonato de España de Vuelo a Vela. Monflorite (Huesca), 2006.

El LS 3 es un velero de la clase 15 metros que voló por primera vez en 1976. Es un peazo de avión, con un planeo de más de 40, que corre mucho y sube bien en térmica, aunque puede que no sea tan bueno como el ASW-20. Entre sus características notables, tiene flaperones en toda la envergadura de las alas, y éstas pesan un montón. En Alemania a este velero se le llama con sorna LS-blei (plomo), en lugar de LS - drei (tres), porque cada plano pesa 85 kilos. Lo cual no es muy bienvenido a la hora de montarlo.

En todo caso, el avión vuela mucho y bien, y se fabricaron unos cuantos. Es posible hacerse con uno en el mercado de segunda mano por no muchos leuros.

sábado, 20 de agosto de 2016

Buster

Steve Wittman fue un fenómeno de hombre que aprendió a volar con 20 años, en 1924, a pesar de ver solo por un ojo. Tuva una larga carrera como piloto de competición, diseñador y constructor de aviones. Y seguía volando a los 91 años, cuando con su segunda esposa se mató a los mandos de su avión nº 13, "O & O Special". Qué más se puede pedir: haciendo lo que te gusta, con alguien querido a tu lado, y sobre todo lejos de un hospital...

"Buster" está pintado en color rojo brillante. Irradia velocidad: ala diminuta, carenado por todas partes, hélice en cimitarra. Debía ser un espectáculo ver las carreras.

Sus aviones destacan por la velocidad y hay varios aparatos de carreras. Éste que les muestro es uno de los más famosos: "Buster", que está en el Museo del Aire y del Espacio de Washington (USA).

"Buster" se llama así por un personaje de cómic de la época.

Es uno de los aviones de competición más longevos y de más éxito. Empezó en 1931 como "Chief Oskosh" (jefe indio que da nombre a la ciudad y a uno de los más importantes shows aeronáuticos, al que he tenido la suerte de asistir). Su última carrera fue en 1954. Durante este período fue continuamente modificado. Antes de la guerra lo voló el propio Wittman, con los motores de la época: enormes (unos 6 litros), de 4 cilindros en línea y potencias reales probablemente mucho mayores que las oficiales. El avión fue ganando velocidad y perdiendo envergadura: para 1937 tenía menos de 4 metros (¡!) y consiguió un récord mundial de velocidad en circuito de 100 km a casi 400 km/h (¡!).

Atención al obsesivo detalle por la ligereza y limitar la resistencia. Otros aviones clásicos de carreras están inspirados en él: "Bonzo" del propio Wittman, y la numerosa y longeva serie de los Cassutt Special.

En 1938, después de uno de sus numerosos tortazos, Wittman retiró el Chief Oskosh. Tras la guerra, Wittman aprovechó el fuselaje para hacer un nuevo avión de carreras en la categoría Goodyear recién creada. "Buster" debutó en 1947, con un motor Continental C-85 "flat four" de sólo 3 litros y 85 CV, pero esto era suficiente para volar a casi 300 km/h. Wittman ya no voló el avión, se lo dejó a otros pilotos que consiguieron varias victorias, hasta retirarlo en el 54.