sábado, 26 de agosto de 2023

Boredom Fighter

El caza (o la lucha) contra el aburrimiento es el original nombre que le puso el diseñador americano Donald S. Wolf a su avión nº 11, el único que llegaría a construir y volar. El pequeño biplano monoplaza de construcción amateur está pensado para parecerse a un caza de la Primera Guerra Mundial, no necesariamente a uno concreto, aunque en otros sitios dicen que quiere ser un SPAD S XIII.  

 

En el Air Zoo de Kalamazoo tienen el Boredom Fighter original que construyó y voló Wolf. Vean las culatas del motor al aire, los alerones sólo en en los planos inferiores y en general la sencillez. USA, 2019.

 

Es un avioncito pequeño de madera de algo menos de 5 metros de largo, 6 de envergadura y unos ligeros 215 kilos. Lleva un Continental A65 de 65 HP y está pensado para construirlo por pocos dineros y volar tranquilo. Incluso con algún looping si apetece. Sobre todo para su creador fue ese "no me aburro" (más bien disfrutó mucho) cuando llegó su jubilación. Había preparado cuidadosamente el diseño durante años y completado las pequeñas piezas metálicas, pero fue justo tras jubilarse que compró la madera y empezó la construcción.

 

Hacer ahora un Boredom Fighter no sería tan barato como en su momento: Wolf hablaba de sólo 1.200 dólares a falta de motor y hélice (¡!). Pero salvando algo incluso más sencillo debe ser de lo más baratito que te puede llevar por los aires. Si estás dispuesto a echarle 1.500 horas y tienes el sitio para hacerlo.

 

Dos años después, en 1979, voló su creación. Los planos siguen estando disponibles por sólo 150-175 dolores. Parece que se han vendido unos 300 juegos de planos, pero en el registro yanqui de aviones sólo aparecen 26. Y alguno más en otros sitios. No es el exitazo de la construcción amateur. Pero me gusta, y creo que estaría encantado de darme una vuelta en uno. 

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