domingo, 29 de octubre de 2023

Lambada

Mi conocido F lleva casi 20 años con su Lambada (el nombre es por el famoso baile) y desde el primer día que lo vi me ha parecido un avión estupendo. Originalmente creado por la empresa checa Urban Air, el prototipo voló en 1996Pavel Urban, Karel Faitus y Miloš Mládek pensaron en un avión ligero biplaza que sirviera tanto para el vuelo a vela como para el viaje, y para eso diseñaron un motovelero muy fino y aerodinámico con dos tipos de puntas de ala.

 


Estamos en el futuro aeropuerto en construcción de Huesca-Pirineos, lugar absurdo donde los haya, y el Lambada nos deleita con una pasadita. Monflorite, Huesca, 2005.

 

Con las puntas largas, el Lambada mide 15 metros de envergadura, vuela en crucero a unos 150 km/h y consigue un planeo con motor parado de 30. Con las puntas cortas baja a 13 metros, el crucero aumenta a casi 160 km/h y el planeo disminuye a 26. Lleva un consabido Rotax 912 UL de 80 HP, es bonito, puedes llevar mucho equipaje y tiene por tanto una gran versatilidad

 


El flamante y recién estrenado Lambada, todavía con su matrícula de ultraligero checo. Lleva las puntas largas. De hecho creo que no lo he visto nunca con las cortas. Monflorite, Huesca, 2004.

 

Y entonces, ¿porqué el mundo no está lleno de Lambadas, o de su algo mejorado sucesor Sundancer? Pues... porque nada en aviación es fácil. Primero, porque el avión cuesta un pastón. No tengo claro si lo siguen haciendo, pero si es así, piense en ciento cincuenta mil lereles ó más. Sí, es moderno, tiene un ala super guay y vuela muy bien. Pero no deja de ser un chisme más bien especializado que no todo el mundo valora. 

 


El Sundancer es muy parecido al Lambada. Vean en la foto de abajo la diferencia entre la punta del ala izquierda corta con un winglet y la punta derecha más tendida, como la de un Duo Discus original. Feria AERO, Friedrichshafen, Alemania, 2017.

 

Para sacarle provecho como velero tienes que saber volar a vela, y eso es más complicado de lo que parece. Además en ese modo es más bien modesto. Está a la altura de un viejo monoplaza de madera y tela en planeo, pero es más torpe y sube menos. También es verdad que eres tú el que  hace "el remolque" donde quieres, en cualquier momento puedes seguir con motor, y eso abre muchas posibilidades. Como en todos los motoveleros. Si es eso lo que te gusta.

 

F despegando en su Lambada. Casi 20 años de bonitos vuelos. Santa Cilia, 2023.

 

En la otra vertiente, como ultraligero de turismo no es especialmente rápido, la cabina es pequeña, el avión ocupa mucho en los hangares y es relativamente más trasto en tierra: mucho radio de giro, tamaño considerablemente mayor que sus colegas. De nuevo, todo eso es relativo. Especialmente con las puntas cortas es suficientemente veloz como para viajar y los grandes depósitos alares dan para más de mil kilómetros. 

 

F en final en su Lambada, con el motor parado, la hélice abanderada y los frenos fuera. Santa Cilia, 2015.

 

Si se les ha ocurrido, no te puedes llevar las otras puntas en el avión... que según donde vayas te pueden venir bien. Creo que eso no sería especialmente difícil para las cortas, pero claro, no para las largas. Siempre las puedes mandar por otros medios...

 

El momento de la toma, con los frenos fuera y el avión en posición óptima de "tres puntos". Santa Cilia, 2006.

 

En definitiva, reflexiones parecidas a las de su desarrollo mejorado Phoenix: lo que le gustaría ser a un Falke en otra reencarnación. 

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