La carrera profesional de Oleg Antonov, uno de los más famosos ingenieros aeronáuticos de la época soviética, impresiona. Antes de la guerra diseñó un montón de veleros, y eso creo que le acompañó siempre en el planteamiento de sus aviones. Durante la guerra entre otros proyectos estuvo trabajando en la oficina de Yakovlev. Por su talento, este moscovita terminó dirigiendo a partir de 1943 la producción en masa de los cazas Yakovlev Yak-3 en la lejanísima y siberiana Novosibirsk. Miren un mapa para hacerse una idea.
Otro sitio lejanísimo es Uzbekistán. En su capital Tashkent los soviéticos instalaron una enorme planta de producción aeronáutica en 1941, llevándosela literalmente de Moscú en tren ante el avance alemán (¡!). En la Segunda Guerra Mundial fabricaron Lisunov Li-2 (Douglas DC-3 con licencia). Su era dorada fue en la Guerra Fría, desde los 50 hasta su independencia de la URSS en 1991. En esa época construyeron Ilyushin Il-14, el Antonov An-8 que les muestro, Antonov An-12, Antonov An-22, Ilyushin Il-76 y también partes de Antonov An-124, Antonov-225 y Antonov An-70. La serie de sellos de 1995 conmemora ese pasado. |
Su oportunidad vino en la posguerra, cuando le permitieron crear su propia oficina de diseño en 1946 (en Novosibirsk). El primer avión fue el famoso biplano de transporte Antonov An-2, del que se han hecho casi 20.000 (¡!). Pero creo que el paso decisivo (y en realidad por lo que es conocido) es por sus aviones de transporte militares de ala alta y gran capacidad.
El primero fue el Antonov An-8 ("Camp" en la nomenclatura de la OTAN). A principios de los 50 los ruskis empezaron con muchos problemas a desarrollar motores turbohélice. Con estos motores se iba a propulsar una nueva generación de aviones que sustituyeran a los que volaban entonces con motor de pistón: sobre todo Lisunov Li-2 (DC-3 en realidad), sus sucesores Ilyushin 12/14 y los propios Antonov An-2. Con el requerimiento para un nuevo transporte de asalto, capaz de llevar un blindado ligero, aterrizar en un campo sin preparar y que saliera fácilmente por su rampa posterior, estaban sentando las bases para toda una familia posterior de aviones.
En 1952 mandaron la oficina Antonov a Kiev (actual Ucrania), aunque la producción masiva de sus transportes se haría durante años en otros sitios. De hecho, el prototipo An-10 voló por primera vez en Kiev, en 1956. Y resultó ser una auténtica castaña (¡!): malo, inestable e incapaz. Hubo que hacer un completo rediseño, del que salió un avión pasable. Se hicieron unos 150 y tuvo una carrera larga primero con los militares soviéticos, luego con Aeroflot, y finalmente como "resto de serie" volando por África ilegalmente hasta 2010 (¡!).
Lo que creo que fue decisivo es que a partir del Antonov An-8 se desarrollaran los mucho más capaces Antonov An-10 Ukraina y sobre todo el Antonov An-12 ("Cub"). Esto puso a Antonov, que siguió dirigiendo su oficina hasta morir en 1984, en una posición de liderazgo en este tipo de aviones.
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