miércoles, 3 de febrero de 2016

Parece un 737...

Aunque se parece mucho, este avión que les muestro abajo a la izquierda no es un Boeing 737. Es un Dassault Mercure de la extinta compañía Air Inter, única que los usó, y un fracaso en toda regla: sólo se hicieron 2 prototipos y 10 aviones de serie.

Al final de su vida operativa, un Mercure parece mirar con pena a la competencia que le pasa por el morro. Aeropuerto de Barcelona, 1993.

Y es una pena, porque el avión era bueno. Más grande y más rápido que su competencia (Boeing 737-100 y 200, Douglas DC-9-30), el avión voló por primera vez en 1971. Tuvo una larga vida operativa de más de 20 años y cientos de miles de horas de vuelo, sin dar problemas.

El segundo Mercure de serie en el Technik Museum de Espira. Me encanta que los aviones estén "en el aire", te haces una idea mucho mejor de cómo eran en vuelo. Y las fotos son más majas. Alemania, 2019.

¿Qué pasó? Una combinación de factores impidieron su éxito comercial: la crisis del petróleo de 1973, el corto alcance (1.700 km a plena carga, objeto de no pocas bromas) sólo apto para rutas europeas cortas, y la devaluación del dólar que hizo más competitivos a los Boeing y Douglas, fueron los principales. Para cuando se propusieron versiones mejoradas, se había perdido la oportunidad.

F-BTTB se entregó a Air Inter en 1974 e hizo el último vuelo de París a Espira en 1995 (para ir al museo). En 21 años, 35.590 horas y 42.334 aterrizajes, Es decir, de media 50 minutos por vuelo. Y volar de media casi 5 horas al día. Mucho trajín y mucho tute para la estructura.

También puede ser que no hubiera llegado el momento. En 1987 voló  por primera vez el Airbus 320, que no es el reactor comercial más vendido del mundo (es el Boeing 737 con casi 9.000 entregados y más de 4.000 pedidos), pero que teniendo en cuenta que apareció 20 años más tarde, bien se puede decir que les ha dado bastante en el morrillo a los yanquis (casi 7.000 entregados y más de 5.500 pedidos).

Una cabina de las de antes, con "relojes" y la tira de botones y ruedecillas.

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