El Rolladen
Schneider LS 7 es un magnífico velero de clase standard que tuvo mala
pata. Fue diseñado especialmente por Wolf
Lemke para la competición. Tenía
la difícil tarea de superar al LS 4,
un velero de enorme éxito (más de mil fabricados), a su vez sucesor del primer
velero de la casa, el también popular LS1.
A. llevó inicialmente su impecable LS 7 WL a Monflorite, donde recibió
miradas de envidia de los que estábamos por allí. Huesca, 2001.
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Lemke decidió utilizar un ala completamente nueva, con un perfil laminar moderno, mucho alargamiento y carga alar elevada. Para hacerlas, utilizó los últimos recursos
tecnológicos: fibras de carbono y aramida, con lo que se quedan en unos manejables
60 kg cada una. El fuselaje es el
mismo que el del LS 6. Resulta que los fuselajes son costosos de diseñar y
producir, con lo que los diseñadores tienden a usarlos en varios modelos. Esto
es uno de los motivos de que todos los
veleros parezcan iguales.
Los winglets se pusieron a posteriori en prácticamente todos los
primeros LS 7 que salieron de fábrica sin ellos. Le hace prácticamente
indistinguible de un LS 8.
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El velero voló por primera vez en
1987 y resultó ser macanudo. Pero
adquirió mala fama de subir poco. En
un primer momento no se comprendió que las nuevas características aerodinámicas
favorecían velocidades más altas en térmica. Sólo se hicieron 164.
P. montando su flamante LS 7 WL en Monflorite (Huesca), 2008. Fíjense
en el contraste con el Falke
de más atrás, construido en tubo de acero, madera y tela.
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Con el tiempo sin embargo recuperó puntos. No sólo vuela
fenomenal, sino que además mantuvo el manejo dócil típico de la casa, más una buena
comodidad en la cabina. Además la versión con winglets se parece mucho desde
fuera a un LS 8. Así que siguen
costando bastante pasta. Pero considerablemente menos que un LS 8, y
con una respetable fineza de 43.
Pues sí. Me encantaría volar una
máquina de estas.
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