domingo, 14 de abril de 2024

Huskie

Anton Flettner fue un brillante ingeniero alemán que tuvo ideas de lo más originales. Le debemos, entre otras, el barco propulsado por rotores y el compensador aerodinámico. Pero por lo que es más conocido es por sus extraños helicópteros "sincrópteros" o de rotores entrelazados. El primero es de antes de la Segunda Guerra Mundial, y aunque se hicieron unos pocos por su empresa Flettner Flugzeugbau durante la guerra, el desarrollo tuvo lugar sobre todo tras ella.

 

Este Huskie pintado como los de rescate en Vietnam, en realidad es un "bombero" que nunca estuvo en la guerra. Vean el extraño aspecto, los dos rotores con sus aletas de control y que lleva un letrero en la base del rotor que dice "Atención, aproximarse por delante". Esto es porque los rotores estaban inclinados lateralmente y te podían "afeitar" si te aproximabas de lado. El avión situado detrás es una versión militar de la Beechcraft Bonanza pensada para Vietnam también. Museo de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, 2019.

 

Flettner fue uno de muchos científicos alemanes que se llevó Estados Unidos tras la guerra (en la famosa operación "Paperclip") para aprovechar el impresionante esfuerzo en investigación que habían desarrollado. Flettner fundó allí otra empresa, pero finalmente pasó a trabajar como ingeniero jefe en la empresa Kaman Aircraft, y aquí es donde realmente maduraron estos curiosos chismes.

 

La escena de rescate con maniquíes es convincente. Mientras el piloto se ponía en vuelo estacionario el "rescatador" bajaba el cable con arnés para que el piloto derribado pudiera subir y salir pitando. Si además había vietcong disparando debía ser muy divertido. Vean las aparentemente excesivas 4 superficies verticales de cola (¡!).

 

¿Cómo funcionan? el helicóptero tiene dos rotores que giran en sentidos diferentes, luego se cancelan mutuamente el par y no es necesario el rotor antipar que tiene los helicópteros normales. Para poder girar estando tan juntos van "entrelazados". Gracias a que sus ejes de giro están inclinados hacia fuera, y que están sincronizados, en el momento en que la pala de un rotor pasa por encima del otro, éste está alineado de delante a atrás y no chocan. Si no ha entendido, es culpa mía y lo mejor es verlo

 

Parece que sólo queda uno de estos aparatos en vuelo. Como las palas son de madera, y no hay repuestos, no lo vuelan mucho.

 

El otro curioso invento que permite controlar el helicóptero se debe a Charles Kaman (el que fundó la empresa). Si se fijan, algo más allá de la mitad de cada pala hay una aleta separada del borde de salida. Al accionar estas aletas - en realidad son una forma del compensador de Flettner - las palas generan más o menos sustentación y se puede controlar el helicóptero.

 

Las puertas traseras se desmontaban y se dejaba el hueco al aire con una red, para que el habitáculo estuviera más ventilado. El indicativo de etos aparatos era "Pedro" (tal cual, no "Peter").

 

El Kaman HH-43 Huskie fue un helicóptero que voló en 1953, y que en sus versiones finales llevaba un turboeje Lycoming T-53. Este motor (el de los famosos Huey) lo había diseñado otro alemán, Anselm Franz, que hizo los primeros turboreactores operativos del Messerschmitt 262, y que también se llevaron los yanquis a USA tras terminar la guerra (¡!).

 

El Huskie se pensó inicialmente como "bombero aéreo" en las bases militares. Si un avión tenía un problema al aterrizar y empezaba a arder, lo más rápido era mandar un Huskie a que lo rociara con espuma, aprovechando además el flujo de aire de sus rotores para distribuirla y alejar las llamas. 

Sin embargo el Huskie es más famoso porque fue el helicóptero de rescate más utilizado en la absurda guerra de Vietnam. De 1966 a 1970 hizo 888 misiones de rescate en combate (¡!). Pero hacia 1970 se sustituyeron por los más grandes y capaces Sea King. 

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