El Quicksilver GT 500
es un ultraligero clásico de tubo y tela
con más énfasis en las prestaciones.
A mi la verdad es que me gustan más los "Silver" tradicionales, lentorros
y sencillos, puede que porque aprendí a volar en uno de ellos. Pero el
conservar la sencillez unido a la
mayor velocidad (relativamente, la
velocidad máxima no llega a 150 km/h) le ha dado una cierta categoría, se han
hecho más de mil entre la versión monoplaza GT 400 y la biplaza GT 500 desde
que voló por primera vez en 1990.
Un GT 500 en el aeródromo
de El Berriel, Gran Canaria, 2014.
|
En todo caso parece que vuela bien,
mantiene la excelente visibilidad de
los ULM básicos "de ir al aire", y llegado el caso puedes cerrar la
cabina. El avión está certificado en USA o puedes comprarlo como kit. Y aunque
no es barato (casi 50.000 "dolores" con un Rotax 912), tiene su
atractivo. No creo que me compre uno, pero me encantaría dar una vuelta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario