viernes, 9 de agosto de 2024

Chinook

Hay muy pocos chismes aéreos que hayan permanecido tanto tiempo en fabricación continua. Creo que los más antiguos son la avioneta civil Beechcraft Bonanza (desde 1947) y el transporte militar Lockheed C-130 Hercules (desde 1954). Este característico helicóptero de dos rotores en tándem de transporte militar que les muestro, el Boeing CH-47 Chinook es "sólo" un poquito más joven, de 1961, y lleva por tanto en producción 63 años ininterrumpidos (¡!), con el mismo diseño básico. Impresiona.


Les enseño Chinook en el orden cronológico en que los he visto. Las Fuerzas Aeromóviles del Ejército de Tierra español (FAMET) empezaron a utilizar el Chinook en 1972. Éste estaba de exhibición en Monflorite (Huesca) en 1999. Para el recuerdo, no había nada que separara la pista de la gente. Tú llegabas, aparcabas y accedías a la rampa por las buenas. El aparato es un modelo CH-47C: matrícula HT.17-09 (helicóptero de transporte tipo 17, nº9), adquirido en 1978. Se modernizó a CH-47D y tras un avida operativa de 42 años (¡!) se dio de baja en 2020.

 

Según a quién preguntes, el Chinook (por unas tribus indias practicamente desaparecidas, de lo que es ahora el moroeste del Pacífico yanqui, en el actual estado de Oregon) es un helicóptero "medio" o "pesado". No tanto como un Sikorsky S-65 y mucho menos que algún exceso ruso/ex-soviético como el Mil Mi-6 y sucesores, pero mucho. Las versiones más recientes CH-47F pesan 11 toneladas vacías y pueden despegar con más de 22 (¡!). En vertical, sí. Gracias a los dos turboejes de 4.700 HP puestos en la cola por encima del fuselaje. 

 

En la Festa al Cel de 2002, delante de una multitud en las playas de Barcelona, el HT.17-14, un CH-47D de 1986, tomaba en el mar. Esto normalmente no se hace porque el agua salada es un auténtico veneno corrosivo. Al parecer el aparato estaba a punto de un overhaul completo de célula y se permitieron el lujo.

 

La impresionante versatilidad de estos aparatos se debe fundamentalmente a que tienen un espacio de carga completamente diáfano, de 9,3 X 2,3 X 2 metros de largo/ancho/alto, accesible por varias puertas desde el fuselaje y una amplia rampa trasera que se puede abrir en vuelo. Ahí se pueden llevar de manera estándar entre 33 y 55 soldaditos (o hasta 99 prisioneros de guerra en la operación Desert Storm) con un alcance estándar de unos 750 km. También se pueden llevar vehículos militares, pallets con carga, piezas de artillería o lo que sea. Y si no cabe dentro o es más conveniente de esa manera, cosas colgadas con cables por debajo del fuselaje. 

 

De nuevo en la Festa al Cel, que hecho mucho de menos. El CH-47D matrícula HT-17-18 de 1987 en vuelo estacionario sobre las playas, con un BO-105 detrás. Barcelona, 2004.

 

Lo más peculiar de este aparato son los dos rotores en tándem, una herencia directa de los diseños de Franck Piasecki. Los rotores tienen tres palas cada uno y giran relativamente despacio, a unas 225 vueltas por minuto (se oyen con un sonido característico, se "ven" - no como una hélice de avión, y se "sienten" por la vibración que sientes en el cuerpo cuando se aproximan). El de delante visto desde arriba gira en sentido contrario a las agujas del reloj y el de detrás en el otro. 

 

Aunque pintado como el famoso ZA.718 "Bravo-November" de las Malvinas, en realidad es un CH-47A del ejército estadounidense de 1965, posteriormente modernizado en 1983 a CH-47D. Estuvo en Vietnam, donde le pegaron unos cuantos tiros, se retiró en 1998 y finalmente acabó en el Museo de la Royal Air Force. Londres, 2016.

 

Esto le da una maniobrabilidad espectacular. Una jugada característica es quedarse en el borde de un risco apoyado en las ruedas traseras mientras sale el personal del helicóptero por la rampa de atrás y el morro está equilibrado en el aire... Y además es muy rápido para ser un helicóptero, pudiendo llegar a más de 300 km/h. Todo esto no es gratis, claro. Según dicen, espere pagar unos 40 millones por cada uno, y mantenerlos tampoco es poca cosa, con un coste por hora de vuelo de unos 5.000 pavos. 

 

El curso del Tamesis en Londres es un pasillo VFR por el que este afortunado soldadito de la Royal Air Force disfrutaba de unas vistas impresionantes desde la rampa trasera de un Chinook sin identificar. Inglaterra, 2016.

 

La historia comenzó cuando la empresa heredera de Piasecki, Vertol (por Vertical Take Off and Landing, despegue y aterrizaje vertical) recibió en 1958 un encargo del Ejército de los Estados Unidos para fabricar un helicóptero de transporte medio que pudiera llevar hasta 20 tipos y que estuviera propulsado por turbinas de gas en lugar de los motores de pistón previos. Los franceses ya estaban construyendo su Alouette II con turboeje, que permitía mucha más potencia, menor peso y más fiabilidad.

 


Arriba, la Festa al Cel se trasladó a Lérida en 2017, al nuevo aeropuerto. Estuvo bien, pero no era lo mismo. El HT.17-17, un CH-47D de 1986 muestra su maniobrabilidad. Abajo, al día siguiente hicieron una exhibición de cómo cargar en los ganchos externos un todoterreno.

 

Durante el desarrollo se produjo una curiosa bifurcación: el helicóptero original terminaría siendo el CH-46 Sea Knight para la Marina yanqui, y mientras tanto el Ejército pedía un chisme más grande y pesado, que terminaría siendo el CH-47 Chinook para el Ejército. Noten que la Fuerza Aérea miraba para otra parte. Todo el esfuerzo de desarrollo además le pasó factura a la empresa. Boeing vio la oportunidad y en 1960 la compró para convertirla en su división de helicópteros, inicialmente llamada Boeing Vertol y desde 1987 Boeing Helicopter.

 

En el newark Air Museum muestran el ZA.717, un Chinook HC-1 de la RAF de 1982. Vean el compartimento de carga completamente diáfano y los crudos asientos. Inglaterra, 2018.

 

El primer Chinook voló en 1962 y ya tenía la configuración y dimensiones que ha mantenido hasta la actualidad. Y con los mismos motores, los Lycoming T-55 (actualmente Honeywell), sólo que inicialmente daban 2.200 HP (pronto sustituidos por versiones de 2.650 HP) y en sucesivas versiones mucho más: 2.850 HP (CH-47B), 3.000-3.750 HP (CH-47C/D), y 4.700 HP en la actual versión CH-47F. Los dos motores están situados en la cola por encima de la cabina y ambos pueden propulsar ambos rotores, con lo que la transmisión es complicada pero da un plus de seguridad.

 

El ejército yanqui sigue usando un montón de Chinook. Este CH-47F se compró nuevo en 2017 y ha pasado toda su vida operativa volando en Europa. En la exhibición de Farnborough, Inglaterra, 2018.

 

El nuevo juguete estaba listo para participar en la absurda guerra de Vietnam a partir de 1965. Pronto le montaron ametralladoras en las puertas delanteras y en la rampa. El chisme se hizo rápidamente imprescindible por su capacidad de carga, de tal manera que prácticamente no se utilizaba como helicóptero de asalto (para eso estaban los Huey) y se reservaba para llevar cosas: por ejemplo, piezas de artillería, munición, suministros variados y en un uso que resultó ser muy "ahorrador" - la ironía es brutal - recuperar aviones derribados, que costaban una pasta. 

 


Los italianos establecieron su propia línea de fabricación de Chinook (Elicotteri Meridionali a principios de los 70), tanto para su ejército como para la exportación. Arriba, la cabina de mando de este CH-47C de 1977 muestra los actuadores hidráulicos de los pedales y las muchas ventanas para que el copiloto vea bien afuera (el piloto va a la derecha). Abajo, las turbinas de gas son pequeñas y no interfieren con el compartimento de carga. las transmisiones a los rotores son largas y complicadas. En Volandia, Milán - Malpensa, Italia, 2022.

 

Eso fue solo el principio. Hasta la actualidad, 20 países han visto el potencial del aparato y con los años se ha usado en un montón de fregaos: Irán, Libia, Iraq, Afghanistan, las Malvinas, y otros líos diversos. Los británicos han sido, aparte de los yanquis, el mayor usuario del helicóptero, y además se ha fabricado en Japón e Italia. Se han hecho también versiones civiles, no muchas. En total parece que más de 1.200 de estas especializadas y curiosas máquinas.

 

Este sello de 2018 muestra la variedad de helicópteros de las FAMET. El de arriba, un Chinook.


En muchos casos los aparatos se han modernizado de versiones antiguas a las modernas con nuevos instrumentos y sistemas, equipos variados y por supuesto motores más potentes. España sirve de ejemplo: compró los 10 primeros de la versión C en 1972, después compraría 9 más de la versión D, se modernizarían 9 C a D, y posteriormente 17 de los anteriores a la versión F, que todavía no ha terminado, además de comprar uno nuevo para un total previsto de 18 de la versión actualizada F. 


Tiene su ironía que Vietnam haya dedicado un sello de 1988 a la versión civil del Chinook. El modelo 234 es la versión civil del CH-47C.

 

Parece que al helicóptero le queda cuerda para rato. La capacidad de carga, velocidad y relación coste-prestaciones siguen siendo atractivas. Los mucho más modernos convertiplanos Bell-Boeing V-22 Osprey son claramente más rápidos (500 km/h) y tienen más alcance (1.500 km). Pero la capacidad de carga es algo menor, parece que se estrellan más (¡!), y sobre todo cuestan un congo, puede que hasta el triple (¡!). Los yanquis han optado por ellos. Como otras veces, puede que ese salto les de ventaja. Opciones que hay en un mundo parece que cada vez más enloquecido y gastando cada vez más en armas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario