miércoles, 21 de agosto de 2024

Dirigible Schwarz

Dávid Schwarz, fue un Sr. húngaro nacido en 1850 en Keszthely, en lo que entonces era el imperio austríaco, creció en la ciudad de Županja, fronteriza de Croacia con Bosnia-Herzegovina (también parte del imperio), y pasó la mayor parte de su vida en Zagreb, también en Croacia, como comerciante de maderas más bien rico. Nadie lo dice, pero es evidente el origen alemán de su nombre, aunque los alemanes no le consideraban de los suyos. Eso para que vean el considerable lío de identidades que había en Europa por la época.


El dirigible tenía un morro puntiagudo (vuela hacia la izquierda) y una parte trasera plana: todavía no se entendía cuál era la forma aerodinámica adecuada. De hecho parece que debería volar al revés. El único motor Daimler de 16 HP propulsaba con correas cuatro hélices (¡!), de las cuales una era orientable para la dirección tras la góndola, dos fijas a ambos lados de la góndola y por encima, y una horizontal debajo de la góndola para subir y bajar (no se ve en el dibujo). Este lío de transmisiones y hélices fue el que precipitó el fracaso del único vuelo. El aparato tenía una estructura interna de aluminio y estaba recubierto en chapa de aluminio de 0,2 mm. La sustentación la conseguían 13 "células" en el interior de la envoltura que se llenaban con hidrógeno. Resulta curiosa la reivindicación croata de la invención. De una serie de sellos de Cuba dedicados a los dirigibles de 1991.

 

El caso es que pensó y construyó un dirigible curiosísimo, con recubrimiento metálico en aluminio (¡!), una auténtica rareza en la historia de las cosas que van por los aires, ya que sólo lo han conseguido dos. Tras un primer intento fallido con los rusos en San Petersburgo en 1893, se puso a trabajar con el gobierno prusiano en Berlín en 1895, con el apoyo de un industrial alemán. Schwarz murió en un restaurante del centro de Viena en 1897 - yo diría que de tuberculosis - y su chisme se probó ese mismo año, meses después, con "algo de éxito". El aparato consiguió volar como estaba previsto, pero tras perder la propulsión y el control el piloto hizo un aterrizaje de emergencia que destruyó el aparato.

 

Eso situa a Schwarz entre los pioneros del vuelo en dirigible. Se puede discutir quién lo hizo primero: hubo intentos fallidos previos, pero yo creo que Henri Giffard ya lo había conseguido en 1852. Lo que está fuera de duda es que Zeppelin puso en marcha la cosa con el cambio de siglo. Aunque lo intentó, parece que está claro que ni se hizo con la patente de Schwarz ni consiguió los materiales de la empresa que había hecho el dirigible. Genuinamente siguió su propio desarrollo.

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