Eclipse Aviation se fundó en 1998
para hacer un avión que iba a ser la
repanocha: un pequeño reactor ejecutivo bimotor de 6 plazas, capaz
de volar a casi 700 km/h en crucero a distancias de más de 3.000 km, con una
cabina ultramoderna y pilotándo tú solito. Y además, por menos de un millón de dolores.
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Un Eclipse 500 acelerando tras el despegue, con flaps medio fuera y
tren plegándose. El fuselaje tiene una forma estilizada, no es el típico
cilindro en su parte central. Friedrichshafen, Alemania, 2017.
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Incluso proponían una nueva clase para el avión: very
light jet o reactor muy ligero. El avión iba a ser significativamente
más moderno y liviano que otros reactores pequeños (piensen en un Citation
Jet), con un par de turbinitas
diminutas. Las previstas inicialmente eran unas Williams EJ22: 1 m de largo, 38 cm de diámetro, 44 kilos de peso y
310 kilos de empuje.
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Los motores finalmente elegidos eran Pratt & Whitney Canada PW 600,
de 400 kilos de empuje.
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Hay tardes que ni Vd. ni yo
ganamos un millón. Pero por un millón te
dan, entre las cosas nuevas que vuelan y que pueden llevar a 6 mortales,
algo como una Piper Matrix
con un solo motor de pistón, que su hélice hace volar a unos 400 km/h. Ni color con un Eclipse para los mismos
dineros.
Eclipse Aviation partía de un
diseño muy innovador, el Williams V-Jet II de Burt Rutan. Y el fundador de la compañía, Vern Raburn, procedía de
Microsoft y tenía el apoyo de Bill Gates.
Pero a medida que iba tomando forma, los
problemas se acumulaban: se rediseñó el avión, que ganó en complejidad, y hubo
que cambiar de motores. Los costes subían y todo el programa se retrasó. El
prototipo voló en 2002, pero no se
consiguió entregar el primer avión de serie hasta 2006.
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Un Eclipse 500 matriculado en Guernsey, otro paraíso fiscal de los
británicos...
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Eclipse fabricó entre 2006 y 2008
260 Eclipses 500, por los que pedía
inicialmente 2 y luego 2,25 millones... La certificación estuvo plagada de líos
y una vez entregados los aviones tuvieron la tira de problemas. Eclipse quebró en 2008.
Ahora, el avión me parece bonito y con el tiempo se solucionaron
sus problemas. Una nueva empresa llamada Eclipse Aerospace y posteriormente One Aviation volvió
a acondicionar Eclipses 500, y a fabricar Eclipses 550 nuevos (sólo 27 desde 2013,
y ya han terminado). Tienen previsto un
nuevo Eclipse. Pero parece que han
perdido la carrera. A Cessna, Embraer, Honda y hasta a Cirrus
aparentemente les va mejor en esto de los reactores pequeños para escandalosamente
ricos.